Resistiendo, como Ana Frank.


Por: Mónica Maydez.

Ante la crisis sanitaria que se vive en el país, es imposible para muchas personas, permanecer en casa y solo se me ocurre que es porque no han aprendido a estar consigo mismos, disfrutarse, entenderse, reflexionarse, auto complacerse, cuidarse, amarse, etc. 
Tampoco es que se priven de vivir sin el aire y el sol, solo es temporal. Además, ahora contamos con herramientas maravillosas como el internet o plataformas televisivas que, sin duda, harán más amena la estancia entre nuestras cuatro paredes, nuestra cueva.
Te cuento un fragmento literario histórico:
Ana Frank, la pequeña que soñaba con ser una célebre escritora, escribió lo que hoy conocemos como un libro famoso y reconocido a nivel mundial, un libro que ella no pensaba como tal. Escrito entre 1942 y 1944 en Ámsterdam, el diario que hizo referencia a las vivencias de “La casa de atrás”, más de dos años escondidos para no ser capturados, durante la ocupación Nazi de Holanda.
Ocho personas encerradas, dos familias ocultas y temerosas por los bombardeos que se escuchan en el exterior, con el pulso de poder morir en cualquier momento.
Antes de ser delatados, el diario de Ana nos hace llorar, reír y enojar por las vivencias y actitudes de ella, Kitty, Otto, Edith, Margot, El señor Van Daan, Peter, La esposa de Van Daan y finalmente del señor Dussel un odontólogo pedante que se une al final.
Este libro es un fiel testimonio sobre la barbarie nazi a través de la mirada de la pequeña Ana de trece años. Con el panorama que nos regala, nos estremece; el retrato de una época sumamente oscura en nuestra historia donde se cree que aproximadamente, murieron cinco mil judíos acusados de debilitar las potencias económicas, físicas y morales  de una nación.
Ana murió en el campo de concentración de Bergen-Belsen en 1945.
La Biblia dice que no hay nada nuevo debajo del sol. La historia siempre se repite y la literatura nos enseña a reflexionar sobre aquello que no nos atrevemos a experimentar. Te invito a leer el Diario de Ana Frank, al final te darás cuenta que tan terrible es nuestra cuarentena de ahora.
“Mientras puedas mirar al cielo sin temor, sabrás que eres puro por dentro y que pase lo que pase volverás a ser feliz”
-Ana Frank. 


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