3/3 Por:
Mónica Maydez.
¿Y los victimarios?
Para este hecho
delictivo, llamaremos al victimario: “proxeneta”, “padrote” o “tratante”;
aclarando que este sujeto actúa con dolo, ejerciendo algún tipo de coerción con
la víctima y sometiéndola.
Ser padrote es un oficio, ya que implica
adquirir una serie de aprendizajes para llegar a ejercerlo. Ellos aprenden a
auto-disciplinarse, a “matar el sentimiento” y las técnicas de reclutamiento.
Al hablar de matar el sentimiento, aprenden a no sentir nada por la mujer a la
que van a explotar y a no sentir celos al saberlas con otros hombres. Estas técnicas
aplican para los padrotes que reclutan a través de la seducción.
En la comunidad
de Tenancingo, Tlaxcala, es un oficio que se transmite de los padrotes
avanzados a los principiantes. Ellos hacen reuniones dónde dan clases para
impartir dichos conocimientos y experiencias. Se puede llegar a ser padrote
por: apadrinamiento o bien, por mera tradición familiar. Les enseñan a vestir,
a conseguir mujeres y convencerlas para que trabajen en la prostitución “ser bien verbos”; así como las formas de
mantener a las mujeres “comiendo de su
mano”.
Es cierto que
hay personas que delinquen debido a ciertas experiencias agresivas, de
frustración, inhibitorias y destructivas por las que han pasado en el curso
evolutivo de su vida; cierto también es que existen factores sociales que motivan
estos hechos.
La psicóloga criminal
Hilda Marchiori, comenta: “La historia de
los delincuentes sexuales muestra hogares deshechos, falta de supervisión y
carencia de afecto y cuidados, rodeados durante la infancia de condiciones muy
poco favorables”.
El psiquiatra
forense David Abrahamsen, al respecto, pronunció: “Todos los delincuentes sexuales exteriorizan hostilidad y
resentimiento frente a la autoridad, todos han sufrido por carencias
emocionales en la infancia, todos han sido afectados por la conducta de uno o
de ambos padres, de características sádicas y dominantes”.
Por ello, es
contundente aterrizar en el trastorno de la personalidad que presentan los
padrotes o proxenetas:
*Personalidad Antisocial:
·
Incumplen con las normas
sociales respecto a los comportamientos legales.
·
Son personas que engañan
manifestando una conducta seductora usando mentiras repetidas.
·
Muestran irritabilidad y
agresividad.
·
No sienten remordimiento, son
indiferentes al hecho de herir o
maltratar a alguien.
·
Presentan irresponsabilidad
constante, son incapaces de mantener una relación laboral o una obligación
económica.
Los victimarios,
en gran mayoría, carecen de instrucción educativa, algunos presentan primaria
trunca. Contrario a los hijos de estos que cuentan con estudios superiores en
escuelas particulares.
Para concluir
este tema, es recomendable ver la película Las
elegidas del director David Pablos.
En cuya historia se narra la trágica realidad de la trata de menores en México
y la manera en que la familia conspira para que sus integrantes sean parte de
esta pesadilla.
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